Dulces y golosinas: una tentación irresistible ¿Debe comerlos, aunque quizá le quite el apetito? Lee más de esto
A la mayoría de los pequeños les encantan los dulces y golosinas, y con el regreso a clases, las tentaciones también regresan pues la escuela es el lugar ideal para comerlos, ya que no hay quien vigile. Pero… ¿Se debe dejar que los coma, aún sabiendo que le quitarán el apetito y favorecerán las caries? Toma nota de qué hacer para que no abuse de ellas. Comer un caramelo, chicle o paleta de vez en cuando no es nocivo ni para los pequeños ni para los adultos. Lo malo es que los pequeños no son capaces de comerse sólo una golosina, y después de la primera quieren la segunda, y luego la tercera... hasta que se terminan la bolsa completa o el dinero para comprarlos. Esto lógicamente, sí perjudica su salud por varios motivos. Para comenzar, está demostrado que el comer golosinas favorece la aparición de caries. Si cualquier producto que contiene azúcar en su composición aunado a una deficiente higiene bucal, facilita la proliferación de bacterias que deterioran la dentadura; mucho más lo